El 3 de julio de 1999, el entonces Departamento de Delitos de Alta Tecnología de la Unidad Central Operativa (UCO) explotó la “Operación DIABLO”, que se considera la primera contra la pornografía infantil de Internet realizada en España después de la reforma del Código Penal en relación a los delitos contra la libertad sexual.
La operación DIABLO
En aquel entonces un hombre de 32 años, instalador de antenas parabólicas, fue detenido por la Guardia Civil en Palma de Mallorca, acusado de ser enlace de una red de pederastia y difundir a través de Internet material pornográfico en el que aparecían niños, incluso practicando sexo con animales. La detención, según explicaron en su momento los portavoces de la Guardia Civil, fue el resultado de la denominada “Operación DIABLO”. El Grupo de Delitos de Alta Tecnología comenzó sus investigaciones tras recibir en la página web de la Guardia Civil (http://www.guardiacivil.org) numerosas denuncias de ciudadanos sobre la existencia de imágenes de pornografía infantil en la red.
Los agentes comprobaron que una de estas páginas estaba radicada en España y que había recibido 700.000 visitas en sus cinco meses de funcionamiento, según informó ayer la Guardia Civil. Esta página facilitaba enlaces con más de 100 dominios de todo el mundo, a través de los cuales se podía acceder a imágenes de sexo entre niños y adultos, menores entre sí e incluso realizando prácticas eróticas con animales.
Mediante Internet se podía enlazar con otros servidores en EE UU, Canadá, Guatemala, Uruguay, Alemania, Holanda, Austria, Rusia e Italia, entre otros. Los agentes comprobaron que en la web era posible mantener conversaciones (chat) en las que se animaba a visitar fotos pornográficas sin censurar.
Los expertos del instituto armado determinaron que un ciudadano residente en Palma de Mallorca era el que supuestamente confeccionaba estas páginas y las colocaba, a través de Internet, en un proveedor de Sevilla, desde donde se realizaba la difusión en la red. También realizaba la misma operación con otros contenidos eróticos ubicados en un servidor de Barcelona.
El sospechoso fue localizado y detenido en Palma de Mallorca, a la vez que los guardias civiles registraron varios inmuebles relacionados con el sospechoso, en los que se decomisaron revistas, fotos y vídeos pornográficos. Posteriormente a esta primera detención, la Operación Diablo continuó tanto en el ámbito nacional como en el internacional, y se alertó a la Interpol en los países de Estados Unidos, Canadá, Guatemala, Uruguay, Alemania, Holanda, Austria, Eslovaquia, Letonia, Rusia e Italia.
23 años de lucha contra la pornografía infantil.
El actual Departamento Contra el Cibercrimen de la UCO ha sufrido una gran evolución desde 1999 hasta nuestros días en la lucha contra los abusos sexuales a menores en Internet, inducida por el aumento exponencial, año tras año, de este tipo de delitos. En la actualidad, este departamento cuenta con una sección en exclusiva dedicada a la lucha contra dicha lacra.
Y es que, sin ir más lejos, la semana pasada, la Guardia Civil explotaba la Operación MARINO con el bloqueo de casi 50 portales de abuso sexual infantil en la Dark Web.
En pleno siglo XXI, las nuevas tecnologías juegan un papel fundamental. Hablar habitualmente con los menores respecto a su navegación por Internet y tratar de tener información relativa a los contenidos que ven y consultan genera confianza con ellos, además de permitir a sus padres una mayor protección.
En esta lucha, además de la incansable labor de la Guardia Civil, también podemos ayudar nosotros reportando cualquier indicio que tengamos sobre pornografía infantil a pornografiainfantil@guardiacivil.org
Fuentes de información | ElPaís | Guardia Civil.
Fundador y director de DerechodelaRed.