Con el incentivo de pornografía gratuita, la compañía de seguridad estadounidense Zscaler ha detectado una nueva manera de secuestrar dispositivos móviles a través de la instalación de una app llamada «Adult Player».
Esta aplicacion es capaz de tomar fotografias sin el consentimiento de los usuarios (usando la cámara frontal), para posteriormente inhabilitar el dispositivo móvil solicitando un pago que puede alcanzar los 500 dólares (unos 450€).



