La empresa ha publicado todas las medidas que está tomando para contrarrestar las prácticas terroristas en su plataforma.
Su postura ante el terrorismo es simple: no hay lugar para el en Facebook.
Lo que decimos aquí tiene consecuencias en la vida real.
Con esa idea nace el proyecto ‘Rewind’ apostando por una respuesta activa ante el odio irracional en las redes.
Un suizo ha sido condenado a 4.000 francos (3.675 euros) de multa por un ‘Me gusta’ en una publicación de la red social Facebook que tachaba de racista a un conocido defensor de los derechos de los animales.
La Sala II del Tribunal Supremo considera que fueron mensajes de humillación y burla que «alimentan el discurso del odio, legitiman el terrorismo como fórmula de solución de los conflictos sociales y, lo que es más importante, obligan a la víctima al recuerdo de la lacerante vivencia de la amenaza, el secuestro o el asesinato de un familiar cercano».















